Las mascarillas están diseñadas para aportar la hidratación que tu melena necesita, sobre todo si tiene un aspecto débil y maltratado. Aunque hay muchos tipos de mascarillas, su efectividad dependerá de dos cosas fundamentales que debes tener en cuenta a la hora de adquirir un tipo u otro: la primera consiste en escoger la mascarilla adecuada a las necesidades de tu cabello y la segunda, la más importante, aplicarla de forma correcta para conseguir el efecto deseado.
Para aplicar la mascarilla en el pelo, previamente debes lavarlo con champú y luego aplicar el acondicionador. A continuación, elimina el exceso de humedad con una toalla y aplica la mascarilla. Trata de no extenderla desde las raíces y solo aplícala desde la parte media del pelo hasta las puntas. En el caso de que el cabello sea corto, solo emplea en las puntas.